|
EL SALAT SALAT DEL VIAJERO Y DEL ENFERMO |
El
Salat del enfermo
Aquel
que por motivos de enfermedad no pudiera realizar el Salat de pie, debe hacerlo sentado, y sin tampoco pudiera,
que lo haga recostado sobre un costado e incluso sobre su espalda si no pudiera,
orientando sus piernas hacia la Qiblat
si su estado de salud se lo permite, haciendo los gestos correspondientes al Ruku'
y al Suÿûd.
El
Salat del viajero
Permite
el acortamiento de los Salat de
cuatro Rak'at a dos, para aquellos que
se encuentren de viaje.
En cuanto a la distancia que se considera "viaje" no hay nada
en la Sunna que delimite este concepto de forma específica. La mayoría
de los 'Ulama son de la opinión de
que es lícito acortar el Salat
para aquel que abandona su ciudad de residencia.
Un viajero puede acortar su Salat mientras permanezca de viaje, e igualmente si permanece en el lugar por razones de negocios, u otros asuntos, puede acortar su Salat todo el tiempo que permanezca allí, inclusive durante años. Según Ibn al-Qayyim se considera viajero cualquier persona que estando en algún lugar no tengan la intención de residir definitivamente allí, y que piense por tanto volver a su lugar de origen. Sin embargo hay discrepancias en este punto, pues algunos autores piensan que pasado un cierto tiempo, que varía según cada uno, debe volverse a hacer el Salat con normalidad. Por ejemplo, Malik y ash-Shaf'i dicen: "Si uno tiene la intención de permanecer más de cuatro días, debe hacer el Salat completo, pero si su intención es la de permanecer menor tiempo puede acortarlos."