ÍNDICE

AS-SIYAM

EL AYUNO

 

 

I'TIKÂF

(RECLUSIÓN EN LA MEZQUITA)  

      

         I'tikâf significa adherirse, aferrarse a algo, ya sea bueno o malo, y apartarse del resto de cosas. Allah dice en el Corán: ¿"Qué son esas imágnes a las que adorais ('âkifûn)?". (al-Anbia:52).

         Aquí vamos a emplear este término con otro significado, que es el de reclusión en la mezquita con la intención de acercarse más a Allah.

         El Profeta (s.a.s.) realizaba el i'tikâf durante diez días en cada Ramadân. El año en que murió lo hizo durante veinte días. Los compañeros y mujeres del mismo también lo realizaban, y así lo siguieron haciendo trás la muerte de aquel. No obstante carecemos de hadices fuertes que nos hablen de sus virtudes. Podemos considerar que hay dos tipos de I'tikâf , el que es sunna y el obligatorio. El primero es aquel que realiza cualquier musulmán, siguiendo el ejemplo del Profeta (s.a.s.), para conseguir una mayor proximidad a Allah, siendo preferible hacerlo en los diez últimos días de Ramadân.

         El obligatorio es aquel que se hace por un juramento o promesa, constituyendo por tanto una obligación para la persona que lo haya hecho.

         En cuanto al plazo de tiempo depende de que tipo de i'tikâf se trate, pues si es debido a promesa o juramento se hará el tiempo que se haya previamente determinado a sí misma la persona, pudiéndose hacer desde un sólo día, hasta todos los que se quieran.   

         En cuanto al i'tikâf sunna no tiene un plazo de tiempo determinado, pudiéndose hacer periodos cortos de tiempo. En este caso el i'tikâf puede ser finalizado en el momento que la persona lo decida, incluso si decide cortarlo antes de lo que tenía previsto hacerlo inicialmente.

         Las condiciones para realizarlo son las de ser musulmán adulto, y en el caso de la mujer, que no se encuentre menstruando, o con hemorragia post-parto.

         Por tanto el i'tikâf requiere dos cosas fundamentales, la permanencia en la mezquita y la intención; si falla alguna de las dos no puede considerarse que la persona esté haciendo i'tikâf.

         En cuanto al tipo de mezquita en la que se puede realizar hay disparidades de criterio, sosteniendo algunos que cualquier mezquita es válida, como es el caso del imam Mâlik, mientras que otros piensan que sólo se debe hacer en aquellas mezquitas en las que se realicen los cinco Salât y haya un número importante de musulmanes; no obstante, esta última opinión no encuentra argumentos fuertes que le den respaldo.  

 

 

Actos permitidos a aquel que realiza el i'tikâf 

 

         1) La persona puede abandonar su sitio, o lugar donde lo esté realizando para despedirse de su familia, o decirle adiós.

         2) Se puede peinar, cortar el cabello, las uñas, asear su cuerpo, llevar ropas limpias y elegantes, así como utilizar perfumes.

         3) La persona puede salir para realizar cualquier necesidad fisiológica que se le presente. Así mismo si no hay nadie que le traiga la comida puede salir para obtener su sustento. En general puede salir para realizar todo aquello que no le esté permitido hacer en la mezquita.

         4) La persona puede comer, beber, y dormir en la mezquita, así como mantener limpio el recinto. Igualmente, puede hacer contratos matrimoniales, comprar, vender, etc.  

 

 

    Actos que invalidan el i'tikâf  

         1) Abandonar intencionadamente la mezquita sin que haya una necesidad que lo justifique, aunque la ausencia sea por un lapso pequeño de tiempo.

         2) El abandono del Islam, puesto que ya carecería de sentido todas las 'ibâdas.

         3) La pérdida de la razón, ya sea por enfermedad, o embriaguez. La aparición de la menstruación, o la hemorragia post-parto.

         4) La relación sexual. No obstante se puede tocar a la mujer o esta al varón si hay ausencia de deseo sexual en ello.  

         A continuación vamos a tratar una serie de temas íntimamente relacionados con la vida de todo ser humano y ante los cuales vamos a ver la actitud del Profeta (s.a.s.) frente a los mismos, ejemplo para todos los musulmanes cuando sean confrontados con la enfermedad, la muerte, el funeral, y el dzikr (recuerdo de Allah). Todas ellas son situaciones en las que el musulmán tarde o temprano acaba enfrentándolas, y para las que en las enseñanzas de nuestro Profeta (s.a.s.) encontramos, como siempre, el modelo y la vía de la mejor de las criaturas, Rasulullah (s.a.s.)