INTRODUCCIÓN EL ISLAM |
En Muhammad (s.a.s.) se consuma la historia de los profetas, siendo él (s.a.s.)
el Sello de los Profetas (Játimul-anbiyà).
Con sus enseñanzas y el ejemplo de su vida transmitió a los hombres el Islam,
el Dîn de Allah, la armonía de la
naturaleza. Su mensaje contiene tanto un sentido profundo de la trascendencia
basado en la radicalidad de la unidad y unicidad de Allah, del ser humano, de la
vida y de la existencia, como también un sentido profundo y radical de la
solidaridad y comunidad, fundamentado en la experiencia individual y colectiva
del Tawhid, el arte de la unidad. Trascendencia del individuo y comunidad
se conjugan en el Islam estrechamente hasta constituir su esencia y su realidad,
siendo ambos aspectos indisociables: la experiencia personal de la trascendencia
sirve de base para el surgimiento de esa comunidad, y a su vez la comunidad se
organiza para permitir esa experiencia libre y soberana.
Durante casi veintitrés años, Muhammad (s.a.s.) invitó a las gentes a Allah, y con ellas constituyó una comunidad y una nación (Umma). Por todo ello se le llama Rasulullah.